En el número 106 de la revista Letras Libres®; viene una entrevista a uno de mis escritores favoritos latinoamericanos. Además de tener buenos libros, a Mario Vargas Llosa lo considero uno de los mejores librespensadores de América Letrina, lejos de los dogmas del Idiota Latinoamericano y con una visión aguda de los problemas que aquejan a esta zona del globo terráqueo.
Ahora, dentro de la entrevista da una definición clara del liberalismo económico y porque además de él yo también creo que es lo mejor para salir del Ostracismo Mundial en el cual los latinos estamos sumergidos.
Aquí cito textualmente:
Yo creo que el liberalismo es realista pues parte de unos hechos muy concretos respecto al ser humano y a la naturaleza humana. A muchos de nosotros que estamos todavía muy impregnados de romanticismo nos cuesta trabajo aceptar, por ejemplo, que somos seres profundamente egoístas, profundamente centrados en el interés particular. Me parece que montar enteramente una organización de la sociedad partiendo del principio básico del altruismo generalmente nos lleva a la irrealidad, a una ficción. El liberalismo parte de una realidad mucho más pedestre y para muchos deprimente: que hay unos intereses personales muy relacionados con el egoísmo, no con el altruismo, que determinan, si no en todos los casos, en la mayoría de ellos, la conducta de los seres humanos. Entonces es preferible reconocer la sociedad partiendo de esa realidad en vez de partir de la irrealidad de creer que los seres humanos funcionan por idealismo, por altruismo o por generosidad. En la mayor parte de los casos, los seres humanos tienen intereses, defienden posesiones o derechos. Ésa es básicamente la idea liberal que provoca más rechazo. Por eso se dice que es un sistema egoísta e individualista. Pero si se crea un sistema en el cual una persona, defendiendo esos intereses, es creativa y se siente estimulada a producir y a crear riqueza, actuando bajo unas reglas de juego que sean equitativas, que no permitan a una persona abusar de las demás, al final se va creando un patrimonio, una prosperidad, un progreso que revierte sobre el conjunto de la sociedad. Ahora, yo creo que esas reglas de juego indispensables solamente pueden existir si existe una democracia, si existe una legalidad, si existe una justicia independiente del poder político y del poder económico. Eso es fundamental. Pero la democracia en sí misma no crea prosperidad. La democracia defiende los derechos humanos. Crea un clima de libertades que permite que los gobiernos sean fiscalizados, que haya renovación de los poderes políticos, pero por sí misma no crea prosperidad. Sólo el mercado y la competencia la crean. Ésa es la lección de la historia. La prosperidad es consecuencia de un comercio en el cual se ofrecen ciertos servicios y ciertos productos a un mercado de consumidores. En esta competencia es donde va surgiendo la riqueza. Creo que éste es el principio fundamental del liberalismo en lo económico. Eso para mí es absolutamente inseparable de la libertad, la legalidad, el sistema de consensos y de contrapesos. En general lo que representa el liberalismo es algo que está muy alejado de los grandes prototipos sociales románticos, y por eso yo creo que provoca tanto rechazo.
Aquí dejo el link de la entrevista completa: http://www.letraslibres.com/index.php?art=12399
sábado, 13 de octubre de 2007
Vargas Llosa y el por qué me considero Liberal...
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